En la novela En el país de los puros la autora nos transporta a Pakistán, el país de los puros, explorando sus complejidades políticas, sociales y culturales a través de una historia de intriga, peligro y transformación personal. La novela sigue a Anne, una joven periodista francesa que investiga la amenaza de que un grupo terrorista pueda acceder a la bomba atómica en el único país musulmán con energía nuclear. Su viaje la lleva a descubrir una nación muy diferente a la que imaginaba, marcada por contrastes entre la belleza aristocrática de Lahore, con sus palacios, mezquitas y jardines mogoles, y la presencia de redes de espionaje, fuerzas militares y movimientos extremistas. En su intento por infiltrarse en una organización responsable de ataques mortales, Anne es secuestrada y enfrenta condiciones extremas que pondrán a prueba su resistencia. A lo largo de esta travesía, conoce a Karim, un hombre de teatro que pone en escena las obras de Beckett en Lahore y que, además de amar profundamente su país, guarda un secreto que podría cambiarlo todo.

En El perfume de nuestra tierra Kenizé Mourad relata el conflicto de Palestina a través de las voces de quienes lo viven: palestinos e israelíes, niños, jóvenes, mayores, obreros, estudiantes, periodistas y luchadores por los derechos humanos. Desde quienes se hacinan en un campo de refugiados de Gaza, rodeados de tanques que disparan a las primeras de cambio, hasta familias de clase media israelí que apenas conocen de vista a algún palestino; desde un colono en Cisjordania hasta un antiguo fedayín.